¿Ponerse implantes dentales duele?
El miedo al dolor es el peor acompañante a la hora de acudir a la consulta del dentista. Nos atenaza cuando, en realidad, los profesionales de las clínicas hacen todo lo necesario para que estemos cómodos y no sintamos malestar alguno. Sin embargo, mucha gente sigue temiendo el momento de tumbarse en el sillón porque piensa que una limpieza o la colocación de implantes dentales le van a doler.
En este artículo te explicamos por qué el dolor y los implantes dentales no van de la mano. Todo lo contrario: hablamos de un procedimiento rápido y que no resulta traumático ni molesto gracias al uso de la anestesia local, una técnica que utilizamos en nuestra clínica de Sevilla.
Antes de nada: ¿qué son y por qué son importantes?
Además de un evidente perjuicio estético, la pérdida de una pieza dental puede desencadenar en el futuro otros problemas relacionados con la salud bucodental. El resto de piezas dentales tenderán a moverse, lo que dificultará la higiene dental, dejando vía libre a las caries, el sarro y enfermedades de mayor consideración.
Por eso es importante recurrir a la implantología dental y tener siempre presente que no nos va a resultar dolorosa. No solo por cuidar nuestra imagen, sino sobre todo por recuperar la funcionalidad y no desproteger la salud bucodental.
Tipos de implantes dentales
- Implante unitario. Es un recurso relativamente sencillo y el más recurrente cuando al paciente le falta una única pieza dental. Consiste en una sencilla cirugía mediante la que se practica una pequeña incisión en la encía con el fin de dejar el espacio justo al implante de titanio, que se adherirá al hueso subyacente. Pasado un periodo de unos dos meses, con el implante asentado, el odontólogo colocará la corona en la parte superior.
- Implantes en desdentados parciales. Se recurre a este método cuando el paciente ha perdido varias piezas. En realidad, es muy parecido y tan indoloro como el implante dental unitario, solo que se actúa sobre una superficie mayor de encía y es posible que se tengan que tallar los dientes adyacentes para colocar un puente.
- Rehabilitación estética completa. Para los casos más complejos, marcados por la ausencia de muchas piezas dentales. Tras un riguroso estudio del caso, los profesionales toman impresiones digitales de la boca para hacer una prótesis a medida. El proceso es más largo que los anteriores y generalmente se combina con tratamientos periodontales, pero permite recuperar la estructura del maxilar y la función masticatoria y resulta igual de indoloro.
Por qué los implantes dentales no te van a doler
El procedimiento con implantes dentales no es una cirugía agresiva, por eso, siempre que lo lleve a cabo un profesional, no deriva en dolor ni en inflamaciones. Esto es así porque, como comentábamos al principio, el paciente no siente nada: los implantes dentales, igual que ocurre en muchas otras intervenciones, se colocan después de que se haya suministrado anestesia local u otros procedimientos, como la sedación consciente. En resumen, que el miedo al dolor no debe ser un impedimento para colocarte implantes dentales.
